lunes, 14 de diciembre de 2009

Como ahora



Hace un tiempo injustificable
que no pienso como hacer para
merecerte sin que varíe un ápice
la forma en la que ahora me quieres.
Y mucho me temo que hoy,
mientras persistas en esa actitud de
considerar alimento mis veleidades,
no propiciarás las condiciones.
Y no podré evitar, como espero que
perdure, abandonarme a tu suerte
como recolectando sin sembrar cada
hazaña que tus manos me maduren.

5 comentarios:

  1. Hay que bonito.
    Me he quedado sin palabras.
    Muchos besos

    ResponderEliminar
  2. eso madurar en manos ajenas y abandonado al sino es como una eterna resaca después de la perfecta embriaguez. Jode por la falta de voluntad pero es inevitable y placentero.

    ResponderEliminar
  3. Hermosos versos, más allá de tus complejidades.
    Cuidado con los anuncios de publicidad, relantizan mucho al abrir el blog y son un autemntico coñazo (para lo que dan).
    Un beso Antonio, me has visto ya recitando en videos?

    ResponderEliminar