Arrecia la lluvia sobre el mar en calma…
Una hoja aún fértil desprendida por
estridentes pájaros cae sin destino
sobre la tierra anegada…
El viento lo viola todo con su gélido
desorden y su silbido intruso…
Una carrera de nubes tenebrosas
anuncia un fin y cientos de extraños
comienzos…
Sed de nada me ahoga…