Reptiles
¡ ¿Estás?!
Más bien pronto alguien o algo
hará que reptemos por las alcantarillas
por abandonarnos
inconclusos.
Sé que es una amenaza dispersa, quizá
hasta utópica —sobre todo para el que con
el suicidio espera invocar la salvación—
pero, también lo fue embarcarnos en
nosotros sin estar dispuestos a engrosar
esta caricatura de paraíso prometido,
tan terrenal como histérico, tan
idílico como, a la postre, resignado.
El tiempo que nos sucede debe ser
como la vida de un caracol invernado.
Es una mano vacía desintegrándose
en el seno de un tiempo jamás añorado.
¡¿Estás ahí?!
Dime, como si todo esto aún no nos
hubiese acaecido, ¿lo que fuimos debió
ser muy grande cuando aún nos compensa?
Espero que incluso este poema, por alguna
química de supervivencia, tenga sentido para
explicar algo imprescindible, o para alguien.