Quererte (entre paréntesis) (VII)
Somos lo que somos
porque tememos perder lo escasamente logrado (lo que deseábamos, lo que nos
gustaría que llegara, lo que rozamos algunos días cada vez más espaciados)
Nuestro potencial más
íntimo jamás fue liberado (sería un buen epitafio colectivo para presidir
cementerios):
todos esos besos a
lugares vírgenes o recónditos sostenidos; las palabras sospechosas rezumándonos
inauditas; el saber que nos reclama huyendo en estampida entre desidia y
antenas; el noventa por ciento de la mente dándonos la espalda por… (mucho me
temo que la respuesta a esto último está resuelta en ese abrumador porcentaje
que nos tara)
No hay comentarios:
Publicar un comentario