Poesías, relatos, cine, música... Un remanso en medio de este apocalipsis (grupo EFDLT)

Placer mutuo

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Moda poética (ediciones limitadas)

jueves, 24 de septiembre de 2009

La historia más triste de la historia (XXX)


todo lo relacionado con esta historia.
–Muy bien ¿no será editora? ¿Se imagina usted mi tesis, tantos años abandonada al ostracismo en un cajón sombrío de escritorio, convertida en un best seller?
–No, exactamente una editora…
–Es broma mujer. Espere aquí un momento, vivo muy cerca, en un piso de la acera de enfrente, como siempre. Incluso creo tener alguna copia por algún sitio. En cinco minutos estoy aquí.
–De acuerdo, pero no hace falta que se tome tantas molestias, puedo acompañarla…
–No se preocupe, lo hago con mucho gusto, conversar sobre este tema con usted me ha despertado de nuevo el interés por la historia, por escribir, por saber, por debatir…
–Como quiera, aquí estaré. Pero, por favor, me llamo María, tutéeme.
–Es verdad, con la emoción ni siquiera nos habíamos presentado. Yo soy Milagros, dame un beso, guapa, encantada de haber coincidido contigo. No se vaya, vuelvo en un soplo.
–De aire fresco, continuó la frase María mientras Milagros se alejaba colocándose el bolso en su veloz hombro.

Ya era hora, pensó, una conversación interesante con alguien a quien no despertaba sentimiento personal alguno. Era un verdadero placer para ella el simple hecho de no tener que leer constantemente entre líneas; abandonarse sin temor al placer de las palabras cuando éstas despiertan en secreto, poco a poco, el interés por seguir descubriendo qué fantásticos secretos nos esconde la vida.
Miró su reloj. Apuró el café. Desde la cafetería observó a Milagros entrar en su portal mientras unos obreros de azul intentaban memorizar la armonía de su trasero, seguramente recitando al unísono cualquier piropo obsceno. Quince minutos no eran nada, aunque fuesen exponencialmente superior a lo calculado por su contertulia.
Intentó imaginar cómo serían los hombres si las mujeres pudieran desconectarlos a voluntad de sus instintos. Pero reconoció de inmediato que su imaginación no estaba preparada aún para tales retos.

9 comentarios:

  1. breve, hiperbreve antonio pero con un contenido que paladear.

    abrazo, angel, voltios,

    desde las lindes del sur.

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  2. Sigo aquí de cerca a María y su fascinante historia
    Un abrazote
    Gizz

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  3. No, ya lo creo que no; y la de muchas personas mas tampoco estan para tales retos.

    Esto me ha encantado amigo.

    Un abrazo.

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  4. A mi también me gustaría imaginar como serían los hombres "si las mujeres pudieran desconectarlos a voluntad de sus instintos."

    entretenido relato.

    Un saludo

    Hasta pronto

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  5. -Ángel. Hay 29 capítulos anteriores. Espero que te gusten todos.

    -Gizela. Es su sino.

    -Cornelivs. Al menos, lo reconocemos, que es el primer paso...

    -Pluma Roja. Pues sigue intentándolo. ¿Quién sabe?

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  6. MeCada vez que paso por aquí me pones lo pelos como el papel de lija!


    Saludos y un abrazo!

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  7. Los hombres desconectados de sus instintos? Pues no sé, creo que a mí no me resultarían tan interesantes... ;D
    Saludos

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  8. ¡Tan bello...!Tu blog es un paseo por el jardín frondoso de versos escritos con el alma.Besos.

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