15. De la magia a la rutina
Para mí, el hecho inequívoco, ineludible e irremediable por el cual me hago a la idea de que las vacaciones navideñas han llegado a su fin definitivamente, y por tanto he de volver resignado y malherido a la rutina de las obligaciones de un asalariado medio. ¿Medio? ¿A que hará referencia? puede que a medio feliz, a medio tonto, a medio listo, a medio satisfecho….
Es ir a tirar la basura al contenedor y encontrarme una escultura surrealista y en continuo movimiento de embalajes y cartones de juguetes, pero sobre todo, lo que me devuelve a la realidad más dura y absoluta, es la visión tridimensional de las cajas llenas de lamparones de nata y dulces, de los roscos de reyes.
Si al menos, en vez de envoltorios y cajas manchadas, nos encontráramos esto, amortiguaría un poco el efecto "vuelta a currar".
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